El informe "Workmonitor", elaborado por Randstad, pone el foco en las preocupaciones de los trabajadores a nivel mundial y resalta cómo la coyuntura económica está condicionando las decisiones de las personas en el ámbito laboral.
A lo largo de la historia, la relación entre persona y trabajo ha estado marcado por expectativas, exigencias y reivindicaciones.
Durante el siglo XX, los trabajadores tuvieron diversas demandas, muchas de ellas significativas y con un gran peso en materia de derechos laborales, un tema que aún estaba configurándose frente a las grandes transformaciones sociales y económicas que estaban ocurriendo.
Mejores condiciones y seguridad laboral, salarios justos, leyes para la protección de los trabajadores ante la explotación y el abuso, son algunos de los grandes hitos que se gestaron durante el siglo pasado y que nos llevaron a un mundo del trabajo donde las personas cuentan con mayor amparo legal y pueden desempeñar dignamente sus funciones y labores.
Sin embargo, los tiempos van cambiando, las sociedades avanzan y ese vínculo persona-trabajo no es ajeno a dichos cambios.
En ese sentido, ¿qué espera la gente del trabajo hoy? ¿Cuáles son sus preocupaciones? ¿Cómo el contexto global ha impactado el sentir de los colaboradores respecto a sus organizaciones y las tareas que desempeñan?
Recientemente, el Foro Económico Mundial dio a conocer algunos datos de un estudio realizado por Randstad donde se corrobora que hoy las personas dan mucha importancia al equilibrio entre la vida personal y la vida laboral.
No obstante, también hay un componente económico, influido por el contexto mundial, que mantiene a muchas personas con un grado de incertidumbre elevado y con una gran duda sobre su devenir laboral.
"El vigésimo informe Workmonitor de Randstad revela que la incertidumbre económica actual ha aumentado las expectativas y prioridades de los trabajadores […] Ellos valoran cada vez más un lugar de trabajo más equitativo con un mayor énfasis en el equilibrio entre la vida laboral y personal. Sin embargo, de cara a 2023, ante una posible recesión mundial y el rápido aumento del coste de la vida, los trabajadores también valoran enormemente un empleo seguro y financieramente estable", apunta la nota del organismo mundial.
Estas son las cinco claves que el informe Workmonitor, investigación que recoge la opinión de 35.000 trabajadores en todo el mundo, enfatiza acerca de las expectativas de las personas sobre su trabajo.
Como hemos enfatizado en ocasiones anteriores, el contexto económico y el arribo de una recesión mundial ha condicionado de gran manera el sentir de los trabajadores respecto a su futuro.
Según Workmonitor, al 37% de los trabajadores les preocupa perder su empleo y más del 50% muestra inquietud por su seguridad laboral como consecuencia de la incertidumbre económica.
De todas las regiones, Latinoamérica cuenta con el mayor porcentaje de trabajadores preocupados por su seguridad laboral (60%) y, en contraparte, las personas del noroeste de Europa son las que menos se inquietan ante esa posibilidad (24%).
Asimismo, el 23% de los encuestados tratará de contrarrestar los efectos del elevado costo de vida trabajando más horas.
A pesar de la incertidumbre económica, para las personas el deseo de conciliar su vida personal y su vida laboral se mantiene como una prioridad.
La encuesta de Randstad recalca que el 61% de los consultados no aceptaría un puesto de trabajo si dicho equilibrio se viera afectado, una tendencia que es evidente, principalmente, entre los trabajadores más jóvenes (18 a 34 años).
A su vez, la edición 2023 del Workmonitor destaca que un 48% de los encuestados renunciaría a su empleo si este le impidiera disfrutar de su vida. Por otro lado, más del 30% afirmó que está rindiendo lo mínimo en su trabajo, sumándose a lo que actualmente se conoce como renuncia silenciosa.
Muchas personas de la tercera edad están volviendo al mercado laboral y, paralelamente, muchas otras están postergando sus planes de jubilación, ambos casos motivados por la coyuntura económica del presente.
"Se ha producido un descenso significativo en el número de personas que tienen previsto jubilarse antes de los 65 años, que ha pasado del 61% en 2022 al 51% este año", puntualiza la nota del Foro Económico Mundial.
La investigación de Randstad añade que "para muchos, el empleo es algo más que un sueldo, ya sea por su significado y finalidad, por la interacción social o por experimentar los retos que conlleva un trabajo. Les mantiene conectados y les da un sentido de pertenencia".
Por otra parte, 39% de los trabajadores encuestados afirmó que solicitó aumentos salariales y casi la mitad está recibiendo algún tipo de apoyo económico para pagar energía, transporte y otros gastos.
Al margen de la seguridad financiera, para los trabajadores sigue siendo sumamente importante la flexibilidad laboral, ya que el 40% de los consultados exige acuerdos para trabajo a distancia o híbrido, el 83% prefiere trabajar con flexibilidad horaria y un 27% ya renunció a cargos que no les permitían dicha flexibilidad.
En el caso de las mujeres, quienes muchas veces desempeñan un rol de cuidadoras, la flexibilidad de horarios es mucho más valorada que en el caso de los hombres: 85% frente a un 81%.
Con la irrupción de la pandemia y los cambios que con ella se empezaron a vivir, muchas personas empezaron a darle más relevancia a los valores y el propósito del trabajo en sus vidas.
La investigación de Randstad apunta que "el deseo de lograr un sentido de pertenencia en el lugar de trabajo está impulsando las decisiones profesionales de muchos" y eso se puede evidenciar en la encuesta que sustenta el Workmonitor 2023.
De los consultados, el 54% afirmó que dejaría su trabajo si no se sintiera a gusto en la empresa. Además, la mayoría cree que es importante que los valores de la empresa coincidan con los suyos propios y el 42% asegura que no aceptaría un trabajo si no fuera así.
Respecto a los valores del empleador, el 77 % aseveró que la sostenibilidad, la diversidad y la transparencia son importantes para ellos.
En todos estos insights que ofrece la versión 2023 del Workmonitor de Randstad es evidente que el componente económico y el elevado costo de la vida están condicionando la percepción de una parte importante de la fuerza del trabajo.
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